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Precios de gas

Tipo de servicio	Precio	Características
Boletín de instalación de gas	135 €
Intalación de la acometida de gas	1.200 €	8 m de longitud de tubería al punto de conexión
Instalar gas natural	450 €	Instalación receptora individual de gas
Instalar gas butano	400 €	Preinstalación de gas
Instalar gas propano	800 €	Batería de bombonas 35 kg

¿Cómo obtenemos los precios?

Los precios que aparecen en esta Guía de Precios proceden de información real que recibimos de nuestros usuarios particulares y profesionales, contrastada y revisada por expertos del sector.

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Presupuestos de gas: ¿cuánto cuestan?

Tramitar un boletín de gas

El boletín de gas es el documento que certifica que la instalación cumple con todos los requisitos legales y normativos, que está correctamente realizada y que es segura. Por ello solo puede hacerlo y firmarlo un instalador autorizado. El documento debe incluir un esquema de la instalación y todos sus elementos, así como una declaración responsable. Es imprescindible para dar de alta el suministro y también cuando se hace una obra de reforma de la instalación de cierta envergadura.

El precio dependerá del tipo de inmueble y las características de la propia instalación. En general, el certificado de una instalación de gas cuesta alrededor de los 80-90 €.

Hacer una instalación de gas

El tipo de instalación dependerá en buena medida del gas que sirva de combustible. Las de butano son muy sencillas, constan básicamente de un regulador y llaves de paso en los diferentes aparatos, solo si están muy lejos de la bombona habrá que poner tubería de cobre. Una instalación básica podría costar alrededor de los 250 €.

En el caso de instalaciones de gas natural (y a veces propano) es necesario llevar canalización desde la red general a los aparatos, generalmente una caldera. Dependiendo de la distancia el precio de la instalación será uno u otro. El coste, de esta manera, puede oscilar entre los 250 y 1.000 €.

Reformar una instalación de gas

Por cambios de uso o de necesidades puede ser imprescindible modificar la instalación de gas. Si se cambia la caldera, la cocina o el calentador de sitio habrá que llevar tuberías hasta ellos. Son trabajos más complejos, ya que no solo hay que poner nuevos tubos, también habrá que desmontar y volver a instalar la caldera o poner una nueva, de modo que el precio puede superar los 800 €. El consejo: pedir varios presupuestos de gas.

Hay un tipo de reforma de pequeña importancia y cuyo coste es ínfimo. Es la adaptación de la instalación de un gas a otro, por ejemplo, de propano a natura. En ese caso solo es necesario cambiar unas piezas.

Instalar caldera de gas

Las calderas de gas solo pueden ser instaladas por profesionales cualificados, que deben emitir el certificado correspondiente que garantice su correcta instalación, un documento que puede requerir la empresa suministradora del gas. El precio rondará los 2.000€, teniendo en cuenta la instalación y la compra de una caldera de gas de gama media.

También se puede pedir presupuesto para la instalación de gas solo para ACS. Hay que tener en cuenta que en ocasiones lo único que se necesita es disponer de agua caliente, no es necesaria una caldera, basta con un calentador de gas. Lo que hay que tener siempre en cuenta es tanto la salida de humos como la ventilación.

Información útil

Las instalaciones de gas a nivel doméstico suelen ser más eficientes que las eléctricas. Por un lado, el gas tiene un gran rendimiento y por otro, su precio es menor.

Por ejemplo, en el caso del gas natural, haciendo uso de calefacción, cocina y agua caliente, el ahorro podría llegar al 40%, respecto al uso de estos sistemas con electricidad.

2 semanas
Dificultad: Media

Tipos de gas usados en el hogar

Tres son los tipos de gas utilizados a nivel doméstico, y en algunos casos, presentan entre ellos diferencias notables:

Gas butano: es un gas licuado obtenido del petróleo que se suministra a los hogares en bombonas. Es eficiente, pero cuenta con el inconveniente de que se necesita espacio para almacenar las botellas y hay que estar pendiente de su nivel de combustible. Es un tipo de gas que se usa sobre todo en cocinas y calentadores o para con estufas en hogares que no se ocupan todo el año o cuando las necesidades de gas no son muy grandes.
Gas propano: se puede usar en forma de bombona o canalizado desde un depósito. Es también un gas licuado y tiene la ventaja de que funciona sin problemas incluso en climas muy fríos. Otra de sus ventajas es que se puede utilizar en cualquier zona, ya que no está canalizado y el suministro llega a todos los sitios. Sin embargo, es el gas más caro y también se necesita un espacio para su almacenamiento.
Gas natural: tiene la gran ventaja de que es una energía que llega mediante canalización y, por ello, resulta muy cómodo. Pero además, es uno de los combustibles más limpios y respetuosos con el medio ambiente. Tiene más ventajas, entre ellas que es un gas económico y altamente eficiente, especialmente si se tienen instalaciones, por ejemplo, con calderas de condensación. Por otra parte, las redes de canalización se amplían constantemente y cada vez llega a más lugares.

Ventajas del gas respecto a otras energías

Energía económica

El gas, en cualquiera de sus formas es una energía muy eficiente. Además, hoy en día los modernos aparatos garantizan un gran rendimiento, reduciendo el consumo de manera notable, como es el caso de las calderas de condensación. A ello hay que sumar la comodidad y que los equipos son también mucho más seguros que hace unos años y que el precio de estos combustibles es menor que, por ejemplo, la electricidad.
Utilización en diferentes puntos del hogar

El gas tiene la gran ventaja de adaptarse a muchas necesidades diferentes. Su puede usar solo en cocina, solo para agua caliente sanitaria o para calefacción. O se puede combinar cualquiera de estos suministros. La gran variedad de modelos de equipos permite tener las necesidades cubiertas con el gas. En concreto, destacar la utilidad de las calderas de condensación.
Instalación sencilla

La instalación de gas en un inmueble no tiene mayores complicaciones y se hace de manera rápida y sin obras. Simplemente hay que tener en cuenta que algunos aparatos necesitan unas condiciones determinadas, como una salida de humos, por lo que toda la instalación deberá adecuarse a ello. Lo que es fundamental es que del trabajo se hagan cargo instaladores de gas para que el trabajo tenga validez ante las compañías suministradoras del gas.