Cubierta transitable para piscina: Precio y presupuesto

Una de las grandes ventajas de las cubiertas transitables para piscinas es que cuando la instalación no está en uso la cierran por completo, evitando así el peligro de caídas accidentales al agua. Por ello, son un elemento de seguridad de primer nivel cuando hay niños pequeños. Con una cubierta, además, no es necesaria la instalación de otro tipo de medidas de seguridad, como es el caso de las vallas perimetrales. 

Las cubiertas transitables se fabrican en diferentes materiales y acabados. De esta forma, es fácil que se integren sin problemas con los revestimientos o el estilo tanto de la piscina como del lugar en el que está. La cubierta puede convertirse no solo en un elemento funcional, también en un elemento decorativo. Hay que tener en cuenta, además, que su mantenimiento es mínimo y su aspecto no se altera con facilidad.

Las cubiertas de piscina transitables destacan por su extraordinaria resistencia. Significa que se puede caminar por ellas sin problema, en ese sentido, las más seguras son aquellas que son planas, que no presentan resaltes. Por otra parte, lo habitual es que este tipo de cubiertas tengan un acabado antideslizante para evitar el riesgo de sufrir algún tipo de accidente. No solo es posible caminar sobre ella, sino que se pueden colocar muebles que permitan su utilización en cualquier momento del año.

Cuando el espacio es reducido, las cubiertas transitables permiten optimizarlo al máximo, dando un uso doble a la piscina. En los meses estivales esta se puede disfrutar con absoluta normalidad. Pero gracias a la cubierta transitable, cuando la piscina no se pueda utilizar por la climatología ese espacio podrá tener otro uso, ya que soportan hasta 300 kg/m². De esta forma, se reducen los inconvenientes o limitaciones a la hora de instalar una piscina en pocos metros cuadrados.