Precios y Presupuestos para Instalar una Puerta Corredera Empotrada

Precios y materiales para puertas correderas empotradas

Puertas correderas empotradas de cristal

El cristal es uno de los materiales más usados para instalar puertas correderas empotradas. Tiene la ventaja de que aporta luminosidad y amplitud, por lo que es una opción perfecta a la hora de crear espacios semiabiertos o continuos. Sus precios son elevados dentro de este tipo de puertas. De media, la mayoría de puertas de cristal se mueven en un rango de precios que se sitúa en torno a unos 2.000 € - 4.000 €.

Puertas correderas empotradas de madera

Otra opción de materiales para puertas correderas es la madera, que se adapta bien a cualquier espacio y tipo de decoración. Los precios a la hora de instalar puertas correderas de madera son los que ofrecen una mejor relación calidad-precio. En la mayoría de los casos, este tipo de puertas se mueven en un rango de precios en torno a unos 1.000 € - 2.500 € aproximadamente. 

Puertas correderas empotradas de aluminio

Las puertas correderas de aluminio son una opción que se adapta bien a cualquier espacio y, además, se trata de un material ligero, por lo que permite instalar puertas de grandes dimensiones sin necesidad de que esto implique dificultad a la hora de abrirlas. Su rango de precios se sitúa similar al de las puertas de madera, con precio que varían en torno a los 1.000 € - 2.500 € aproximadamente según el caso. 

Puertas correderas empotradas de Pvc

El PVC es otro de los materiales que se utilizan para la fabricación de puertas correderas empotradas. Se trata del material más barato en relación a los demás, por lo que es una buena opción si no se cuenta con un presupuesto muy holgado. Por lo general, se pueden encontrar puertas correderas empotradas de PVC en un rango de precio en torno a unos 800 € - 2.000 € aproximadamente. 

¿Cuánto cuesta una puerta corredera empotrada?

• Mano de obra: La mano de obra será uno de los factores que habrá que tener en cuenta en su instalación. De media, un carpintero suele cobrar en torno a unos 25 € - 50 €/h. 

• Desmontaje de puerta antigua: En el caso de que haya una puerta antigua, será necesario desmontarla previamente para instalar la otra. Esto aumentará el tiempo de trabajo, por lo que, de media, esto puede suponer unos 200 € - 300 € más al precio final de la instalación de la puerta nueva. 

• Materiales: Los materiales y las calidades escogidas influirán también en el precio final de la puerta corredera. Algunos materiales como el cristal o el metal pueden incrementar el coste hasta en un 30% con respecto a otros materiales como la madera, por lo que es importante tenerlo en cuenta.

• Puertas correderas de una o dos hojas: Las puertas correderas de una sola hoja serán más sencillas de instalar en la mayoría de los casos. Esto hace que sean hasta un 50% más baratas de instalar que las que cuentan con dos hojas. El coste medio de instalar una puerta corredera de una sola hoja será de unos 1.300 €, mientras que en el caso de una puerta de dos hojas este precio se puede elevar hasta los 2.000 € en la mayoría de los casos.

• Obras de albañilería: En el caso de que sea necesario contar con el trabajo de un albañil, lo más habitual será que se necesite para abrir el hueco en el tabique en el que se instalará la puerta. Esto puede incrementar el coste de la instalación en torno a un 10% - 20%. De media, esta obra costará entre 400 € - 600 €, dependiendo del tipo de tabique y tamaño de la puerta.

En el caso de instalar una puerta corredera empotrada de dos hojas en un tabique que haya que abrir, con unas dimensiones de 2x2,5 m y fabricadas en cristal y madera lacada, el coste final podrá ascender hasta los 3.800 €. Por el contrario, si lo que se quiere hacer es sustituir una puerta corredera antigua, aprovechando el casetón donde está instalada y sin necesidad de realizar trabajos de albañilería, el precio medio variará entre los 400 € - 1.200 € según el modelo de puerta escogida.

Antes de la instalación: aspectos a tener en cuenta

• Aprovechar las reformas

  Instalar puertas correderas en tabique o puertas correderas con hoja oculta requiere ciertas modificaciones en la arquitectura del inmueble. Por ello, lo más recomendable es aprovechar cuando se vaya a hacer reformas para realizar su instalación, ya que esto reducirá el impacto que tendrá en su instalación. 

• Revisar ubicación de la puerta

  Antes de instalar una puerta corredera empotrada hay que tener en cuenta que por el lugar en el que se vaya a colocar no pasen cables o tuberías, así como que no haya enchufes o interruptores. En caso de haberlos, es importante valorar si compensa modificar estas canalizaciones y cómo se podría realizar. 

• Muro de carga o tabique

  En el caso de que la puerta corredera con hoja oculta se quiera instalar en un muro de carga, esto implicará que será necesario hacer modificaciones considerables que afectarán a la estructura del edificio. En este sentido, será necesario apuntalar el muro y colocar dinteles en su ubicación. Esto implicará además contar con los servicios de un arquitecto, lo que puede incrementar el coste de la obra entre 1.000 € - 2.000 € aproximadamente. 

• Una o dos hojas

  A la hora de instalar puertas correderas en tabique, estas podrán ser de una o de dos hojas. Según el caso, podrá interesar más una opción u otra. En el caso de que el espacio sea pequeño y lo que se quiera es aprovecharlo al máximo, la mejor opción será una hoja. Si por el contrario lo que se quiere es aportar mayor estética a la estancia, la mejor opción sin duda serán dos hojas. 

Pasos para instalar una puerta corredera con hoja oculta

1. Medir el espacio donde irá la puerta

   Uno de los aspectos más importantes antes de instalar cualquier puerta corredera es contar con las medidas concretas y exactas donde se instalará. De estas medidas dependerá que la puerta encaje a la perfección o no, por lo que es un paso que no se debe infravalorar. 

2. Desmontar la puerta antigua

   En el caso de que la puerta se instale en sustitución a otra antigua, esta deberá ser desmontada previamente para poder instalar la otra. Antes de hacerlo, conviene estudiar con detenimiento si hay alguna parte que pueda ser reaprovechada para la nueva, como pueden ser los marcos. 

3. Rectificar espacio del hueco si es necesario

   Salvo que se haya buscado una puerta nueva con medidas concretas para que encajen en el espacio de la antigua, lo más común será que sea necesario rectificar algunas de las medidas del hueco donde se ubicará la nueva puerta corredera. 

4. Instalar casoneto

   El casoneto es la estructura donde se oculta la puerta corredera cuando esta está abierta. Habrá que instalar uno por cada hoja, por lo que las puertas correderas de dos hojas deberán llevar dos (uno a cada lado del hueco de la puerta). 

5. Acabados

   Una vez que la puerta esté instalada, se deberá prestar atención a los acabados. Tales como pueden ser los marcos de la puerta, la pintura de los lados, el correcto funcionamiento de los ejes, etc. Así mismo, es importante asegurarse de proteger correctamente la estructura antes del montaje de las hojas de la puerta, que será la fase final del proceso. 

6. Montaje final de la puerta

   Finalmente, se deberá proceder al montaje final de la puerta, que consiste en la colocación de las hojas de la puerta corredera en los ejes de la estructura que las conectan con los casetones de la estructura. Una vez que estén colocados, se deberá comprobar que se abren y cierran con normalidad y sin oponer resistencia durante el movimiento a través de los ejes. 

Ventajas y desventajas de instalar una puerta corredera de hoja oculta

• Mayor espacio

  A diferencia de las puertas batientes, las puertas correderas permiten disponer de más espacio en la estancia, por lo que son una opción muy recomendable para lugares de paso o habitaciones estrechas. 

• No hay que hacer doble tabique

  Gracias al uso de casoneto, no es necesario realizar un doble tabique, por lo que no se pierde nada de superficie cuando se opta por este tipo de puertas. De hecho, al ir empotradas, en realidad se gana el espacio que iría destinado al ángulo de apertura de una puerta batiente tradicional. Esto permite ahorrar en torno a unos 500 € - 1.000 € aproximadamente, que es la diferencia de instalarla con un casoneto en lugar de hacerlo con un doble muro. 

• Unificar dos espacios

  El uso de puertas correderas empotradas permite unificar espacios sin necesidad de que estos estén completamente unidos. De hecho, al contar con las puertas correderas, estos espacios se pueden adaptar para cada uso dependiendo de la situación y circunstancia concreta. 

• Precio

  Una de las desventajas de las puertas correderas empotradas con casoneto es el precio, que es considerablemente mayor que el de una puerta corredera vista o una puerta abatible. De media, una puerta abatible de interior o una puerta corredera vista tendrá un precio medio de unos 100 € - 400 € aproximadamente. En el caso de una puerta de interior corredera empotrada este precio no bajará de los 600 € en los casos más económicos. 

• Instalación más compleja

  Otra desventaja en comparación con las puertas abatibles o las correderas vistas es que la instalación de las puertas correderas empotradas es considerablemente más compleja, ya que la estructura que requieren necesita ser adaptada a la arquitectura de la estancia. 

• Atención a enchufes, interruptores e instalaciones

  Al implicar una modificación de los tabiques, también es necesario tener en cuenta todos los aspectos relativos a tuberías, cables, enchufes, y cualquier otro aspecto de la instalación de agua o electricidad que pudiera verse implicada.