Precios y Presupuestos para Reformar Bordes de Piscina

La coronación es el suelo que rodea el vaso, por lo que está muy expuesto a la humedad y la climatología. El deterioro no es el único motivo para cambiar la piedra de coronación, en ocasiones solo se trata de renovar el aspecto de la piscina. Para ello, es necesario levantar la vieja piedra y colocar el nuevo revestimiento, que no necesariamente tiene que ser el mismo, puede ser cerámico, de madera o de cualquiera de estos materiales combinados con césped. En cualquier caso, es esencial una buena colocación que evite filtraciones.

Cambiar la piedra de coronación por otra nueva, incluyendo el desescombro de la antigua, puede costar alrededor de 1.300 €.

La seguridad es un elemento esencial en cualquier piscina. Tanto la superficie que rodea el vaso como el borde son puntos clave, puesto que es habitual que estén húmedos. Para evitar el riesgo de accidentes deben ser antideslizantes. 

Hay piedras de coronación con superficies rugosas que lo garantizan, no así otro tipo de revestimientos. En ese caso habrá que aplicar productos específicos para cada material: líquidos que desgastan ligeramente la superficie, pinturas o morteros. La aplicación se debe realizar cubriendo perfectamente toda la superficie y de manera uniforme. El coste medio se sitúa alrededor de los 500 €.

El skimmer es fundamental para que el agua de la piscina se mantenga limpia. Es un accesorio que se coloca justo debajo del borde de la instalación, normalmente cuando se construye esta. Sin embargo, aunque es complejo, es posible su instalación a posteriori. Para ello, es necesario abrir hueco no solo en la pared de la piscina, también en la piedra de coronación para poder colocar el dispositivo y conectarlo tanto al vaso como al sistema de depuración.

Este trabajo puede implicar cambiar el borde de la piscina si se dispone de material para sustituir las piezas retiradas, lo que elevaría el coste que puede acercarse a los 1.000 €.

Las grietas en los bordes de la piscina pueden aparecer por diferentes motivos, especialmente por los cambios de temperatura y la humedad o por no dejar juntas de dilatación en el caso de la piedra. Más allá del efecto estético, es importante repararlas porque pueden provocar cortes o ampliarse. La reparación dependerá, básicamente del tipo de material de la coronación de la piscina. Si es piedra (natural o artificial) se podrán reparar con cemento y marmolina. Si es madera, habría que aplicar una masilla específica e impermeabilizar la zona. En caso de grietas numerosas, lo más adecuado sería cambiar el bordillo de la piscina.