Precios y Presupuestos para Retirar Amianto

Precios - Cuánto cuesta retirar el amianto/uralita

Retirar la uralita es un trabajo delicado que deben llevar a cabo profesionales cualificados inscritos en el Registro de Empresas con Riesgo por Amianto, y los residuos deben ser correctamente manipulados y eliminados en puntos autorizados.

El precio de eliminar la uralita con fibrocemento dependerá del estado de la cubierta o estructura, del número de metros cuadrados a retirar y de la presencia o no de puntos de gestión de amianto cerca. Por lo general, el coste de este tipo de trabajos puede rondar los 25 € - 30 €/m², a lo que se le añadirá el transporte y descarga del material, con un coste aproximado de 90 € - 100 €/m³. 

A modo orientativo, se puede hablar de los precios siguientes:

• Retirar placas de amianto de 32 m² de cubierta: 900 €.
• Retirar 45 m² de placa de uralita: 1.200 €.
• Retirar 80 m² tejado de uralita de ático con fácil acceso: 3.000 €.
• Quitar tejado de local industrial (cubierta a dos aguas de 7 x 24 m): 13.000 €.
• Retirar bajantes de agua de uralita: 800 €.
• Quitar depósito de agua de amianto: 250 €.
• Retirada de tejado de fibrocemento de 50 m², incluyendo transporte a vertedero y gestión de residuos: 2.200 €.
  
• Evaluación del estado de la uralita: las mediciones y análisis previos a la retirada costarán, de media, alrededor de 200 €. 
  

De todas formas, es recomendable contactar con empresas especializadas en la retirada de fibrocemento para obtener un presupuesto personalizado.

Consejos útiles para la retirada del amianto

• No actuar por cuenta propia

  El amianto es un material muy peligroso para la salud, por ello, nunca se debe retirar si no se cuenta con los medios de protección adecuados y las autorizaciones necesarias. Pero, más allá de este aspecto, retirar fibrocemento con amianto sin permiso puede conllevar sanciones muy severas.

  La Ley sobre Infracciones en el Orden Social LISO 5/2000 establece sanciones de entre 30.000 y 600.000 € por quitar uralita sin permiso. Además de ello, se puede paralizar la obra hasta tomar las medidas preventivas oportunas si hay riesgo de contaminación por amianto. En casos extremadamente graves, incluso, se pueden suspender o cerrar la obra hasta depurar responsabilidades.

• Contratar una empresa autorizada

  Solo empresas acreditadas para ello pueden retirar amianto. En concreto, deben cumplir varios requisitos indispensables. Por un lado, debe estar inscrita en el RERA (Registro de Empresas de Retirada con Riesgos por Amianto). Por otro, debe contar con un plan de trabajo donde consten aspectos como medios y medidas de protección y que debe ser aprobado por el departamento de seguridad laboral de la comunidad autónoma correspondiente. 

  Además de ello, la empresa debe disponer de un código NIMA, una solicitud de admisión de residuos para el tratamiento de este material por parte de una planta específica. Un requisito añadido es que el personal debe tener formación para retirar fibrocemento y estar sometido a un plan de prevención de riesgos y salud específicos para este tipo de material.

• Comprobar si existen subvenciones

  A nivel general no existen subvenciones específicas para quitar uralita. Sin embargo, sí es posible aprovecharse de otro tipo de ayudas (como las relacionadas con la mejora energética de los edificios o de las condiciones de habitabilidad) para sustituir viejos tejados que tienen ese material.

  En el caso de las comunidades, existen planes para el desarrollo sostenible energético o para la rehabilitación de viviendas en los que podría incluirse la retirada de tejados con amianto, como es el caso de Andalucía. En Cataluña, sin embargo, sí se realizan convocatorias periódicas de ayudas directas para quitar uralita con amianto. 

• Análisis previo a la retirada de la uralita

  Es fundamental para que los trabajos se realicen con las máximas medidas de seguridad y protección, tanto para trabajadores como para otras personas o para el entorno. En una primera inspección se suele datar la fecha de construcción del edificio y su uso, lo que permite tener idea de si es posible que tenga elementos de uralita y en qué parte.

  Luego se tomarán muestras, que se analizan en laboratorio para determinar la presencia o no de amianto en el material. El procedimiento se realiza mediante el recuento de fibras en microscopio electrónico, difracción de rayos X o mediante espectrofotometria infrarroja.

  Además de ello, se realizan mediciones ambientales para detectar partículas de amianto en el aire y su porcentaje. Para ello se emplean técnicas como la microscopía en contraste.

  Si los resultados son positivos, se evalúa el riesgo potencial de la presencia de amianto, que es el factor clave para poder acometer la retirada del material sin que ello entrañe ningún riesgo.