Precios y Presupuestos para Reparar un Jacuzzi

Cuando al accionar el sistema de hidromasaje, este no arranca, uno de los posibles motivos del fallo es que el tubo que sirve de conexión entre la bomba y el pulsador se haya aflojado, de modo que para arreglar el jacuzzi simplemente hay que sacar el tubo y volver a fijarlo. 

Otra posibilidad es que, a causa del paso del tiempo y del uso, sea el pulsador manual el que se ha averiado o que sea necesario reparar el cuadro eléctrico del jacuzzi si el encendido es electrónico.

El síntoma más evidente es que el nivel del agua descienda sin causa aparente. Los motivos pueden ser diferentes. En primer lugar, puede deberse a una pequeña fisura o grieta. Si no es muy aparatosa, es posible reparar la bañera de hidromasaje empleando parches a base de resina de poliéster, un endurecedor y fibra de vidrio.

También cabe la posibilidad de que las juntas tóricas estén en mal estado o que las uniones se hayan desajustado por apretar demasiado las juntas, favoreciendo así pequeños escapes de agua. 

El motivo es que en algún punto existe una derivación. Será necesario entonces revisar todos los elementos eléctricos de la instalación, así como el cableado para comprobar en qué punto se produce el cortocircuito. Lo habitual es que sea en la bomba de aire, en las de masaje o en el calentador. 

Cabe también la posibilidad de que se haya producido una fuga en alguna de las bombas y sea la humedad la que provoca que salte el diferencial eléctrico.

Si el agua no se calienta, lo hace en exceso o hay oscilaciones, lo habitual es que el problema se encuentre en el regulador o en el sensor de temperatura. Puede ocurrir que se trate de algún problema en el cableado, que se solucionará sustituyendo la zona dañada o todo el cable. 

Cuando el agua no alcanza la temperatura deseada, el problema también puede ser una avería que obligue a arreglar el grifo termostático del jacuzzi o que las baterías del termómetro se han deteriorado.