En esta guía
- Precios de cambiar suelo
- Precios y materiales para cambiar los suelos de casa sin obras
- Información útil
- ¿Cuánto cuesta poner suelos nuevos una vivienda?
- Consejos para sustituir los pavimentos
- Preguntas que hacer a los profesionales antes de cambiar los suelos
- Qué suelos poner si se quieren cambiar los de casa
Pide gratis y sin compromiso presupuestos a profesionales de tu zona
¿Cómo funciona el servicio de presupuestos de habitissimo?
Precios de cambiar suelo
Tipo de pavimento | Precio | M² |
Suelo laminado | 1.400 € | 70 m¹ |
Parquet flotante | 2.800 € | 80 m² |
Suelo de resina epoxi | 8.100 € | 90 m² |
Suelo vinílico | 3.500 € | 100 m² |
Microcemento | 6.000 € | 120 m² |
Pavimento de gres porcelánico | 6.000 € | 150 m² |
¿Cómo obtenemos los precios?
Cómo elegir el mejor pavimento para tu casa
Precios y materiales para cambiar los suelos de casa sin obras
Tarima flotante
La tarima flotante es uno de los suelos de madera más habituales que se pueden encontrar. Este suelo se instala a partir de una base en forma de red sobre la que se coloca finalmente la tarima (láminas de madera). Esta red es la que hace que la tarima sea "flotante", lo que se traduce en una pisada mucho más amortiguada y cómoda, que además también evita que la madera cruja cuando se camina sobre ella o que las partes de la madera puedan romperse con facilidad. Poner tarima flotante en un piso de 50 m² sin amueblar puede costar alrededor de 1.600 €.
Suelo vinílico
Los suelos vinílicos están desarrollados a partir del vinilo como material principal. Sin embargo, se adaptan perfectamente a la mayoría de entornos, ya que se pueden encontrar con acabados en diferentes colores y formas. De hecho, muchos de ellos imitan a la madera o a la piedra natural, pero sin tener los precios de estas y siendo mucho más resistentes a factores como el paso del tiempo o la humedad. Poner un suelo vinílico en un piso de 74 m² cuesta 3.200 €.
Suelo laminado
Los suelos laminados están desarrollados a partir de materiales sintéticos, lo que permite que sean resistentes a la humedad o los cambios de temperatura. Además, también suelen ser más baratos que otros materiales, como por ejemplo la madera. El suelo laminado está desarrollado a partir de distintas láminas que se conectan entre sí de forma similar a como lo haría un puzzle y, de esta forma, crean la base completa que constituirá la superficie del suelo. Poner un suelo laminado con sistema click en 35 m² puede llegar a costar 400 €.
Microcemento
El microcemento es un suelo que está desarrollado a partir de un cemento muy fino. Este material se aplica en forma líquida sobre el pavimento y, cuando se seca, crea una capa continua que constituye el suelo. Este tipo de suelo tiene la ventaja de que aporta la resistencia del cemento tradicional pero, al mismo tiempo, cuenta con un acabado mucho más fino y elegante, lo que hace que pueda ser una buena opción tanto para interiores como para exteriores, así como para viviendas privadas como para espacios públicos. Aplicar microcemento en un espacio de 25 m² tiene un precio de 1.500 €.
Resina epoxi
La resina epoxi es un material sintético que se caracteriza por su gran resistencia, no solo a los golpes, sino también a sustancias ácidas o corrosivas. Debido a esto, se trata de una opción de suelo que se puede utilizar en casi cualquier lugar, incluidos también entornos industriales o espacios públicos donde el tránsito de personas o la presencia de sustancias peligrosas pudieran afectar a la durabilidad del suelo. Además, se puede encontrar en diferentes acabados o colores, por lo que se adapta perfectamente a cualquier entorno. Aplicar resina epoxi en una casa de 100 m² tiene un precio que puede llegar a los 9.000 €.
Suelos cerámicos
Los suelos cerámicos destacan por sus múltiples ventajas, como su durabilidad, resistencia, versatilidad (se adaptan a todo tipo de estancias) e higiene. Esta última característica es la que les hace perfectos para ambientes como la cocina y el baño. Si se está buscando un pavimento que aporte calidez a los espacios, pero el presupuesto es ajustado, las baldosas cerámicas imitación madera son un gran acierto, ya que su precio es menor que el del clásico parquet. Poner un suelo de gres cerámico imitación madera en un piso de 65 m² puede costar alrededor de 2.800 €.
Suelos de piedra
De la elegancia del mármol a la tradicional y rústica piedra natural, pasando por el cuarzo y el suelo de terrazo, los suelos de piedra son una opción perfecta tanto para interiores como exteriores. Se caracterizan principalmente por su resistencia a agentes externos y su durabilidad. Además, son impermeables, por ello son muy utilizados para pavimentar jardines, terrazas y porches. Poner terrazo en un porche de 28 m² puede costar 550 €. El precio de pavimentar una casa de 100 m² con mármol es de 4.000 € sin contar con la mano de obra.
Información útil
El coste de cambiar un suelo dependerá de diversos factores, como el estado del suelo anterior, la necesidad o no de quitar el suelo original o la calidad de los materiales del nuevo suelo. No obstante, de media, esta reforma se moverá en un rango de precio que puede ir desde los 30 €/m² en los casos más económicos, hasta unos 140 €/m² en los casos más caros.
- 1-2 días
- Dificultad: Baja
¿Cuánto cuesta poner suelos nuevos una vivienda?
Motivos por los que cambiar los pavimentos de casa
- Pavimento anterior en mal estado: los suelos están sometidos a un gran desgaste y a todo tipo de agresiones (humedad, golpes, tránsito continuo, climatología, etc.). Por ello, es inevitable que se acaben deteriorando. Esta es la principal razón por la que se suelen sustituir los pavimentos. Y no se trata solo de una cuestión estética, ya que un suelo en mal estado también puede provocar accidentes si hay grietas, salientes o, en el caso de zonas húmedas ha perdido sus características antideslizantes.
- Aumentar el confort de las estancias: los suelos son un elemento que influyen de manera decisiva en la comodidad de una casa. Hay pavimentos que resultan especialmente fríos o que no aíslan bien. Mejorar las condiciones térmicas interiores o aportar sensación de calidez, por ejemplo, con suelos de madera o derivados, es otro de los motivos más habituales para renovarlos.
- Aumentar la seguridad: en lugares de elevado tránsito, en espacios exteriores o en estancias sometidas a condiciones de humedad es esencial que los suelos sean antideslizantes. En otros espacios, como son los de trabajo, además, deben ser resistentes para evitar que se fracturen y acaben presentando irregularidades. Y, en lugares especialmente sensibles, como centros sanitarios, deben resistir una limpieza exhaustiva. Son medidas de seguridad que hay que cumplir y que en ocasiones obligan a sustituir el suelo.
- Combinar los suelos con la nueva decoración: también un cambio en el estilo y la decoración es un motivo habitual para renovar los suelos. En interiorismo es importante que todos los elementos de la vivienda o del local estén en consonancia y combinen para ofrecer una imagen armónica y equilibrada. Los suelos son, precisamente, uno de los elementos más visibles.
Factores que inciden en el precio
- Mano de obra: las tarifas de los profesionales pueden variar, pero, en líneas generales, la mano de obra puede representar alrededor del 20% - 25% del presupuesto.
- Quitar el suelo antiguo: es uno de los elementos que más influye en el precio de cambiar el suelo de una casa. Según el caso, puede llegar a suponer hasta el 30% del coste final, por lo que afectará de forma significativa al presupuesto.
- Desescombro: la retirada de los restos requiere de contenedores y del transporte a un vertedero para residuos inertes. La carga y transporte de un contenedor estándar puede costar alrededor de 100 €.
- Servicio de mudanza para los muebles: al cambiar los suelos será necesario vaciar las habitaciones. Si el cambio se lleva a cabo por partes, se pueden mover los muebles de una habitación. Pero, si se opta por contratar un servicio de mudanzas que retire los muebles y los vuelva a traer cuando el nuevo suelo esté instalado, el coste final se podría incrementar entre un 5% y un 10%.
- Altura de las puertas: se puede optar por sustituirlas o, simplemente, por descolgarlas, lijar la parte baja y volver a instalarlas. Según el caso, esto puede llegar a suponer un incremento del presupuesto final que vaya desde un 10% a un 20%, aproximadamente.
- Material del suelo: la elección del tipo de suelo es otro de los aspectos que más influirá en el precio. En el caso de los suelos de madera, el precio medio se sitúa en torno a unos 35 €/m². En el caso de un suelo porcelánico, el precio varía entre los 10 € y los 20 €/m². Un suelo laminado tendrá un coste medio de unos 20 €/m². Un pavimento continuo estará en unos 40 €/m², aproximadamente. Mientras, un suelo vinílico se situará en torno a unos 15 €/m² y poner terrazo cuesta alrededor de 20 €/m².
- Otros trabajos: si al cambio de suelo se añaden otras reformas como el cambio de revestimientos (suelos y azulejos) de la cocina o el baño o la instalación impermeabilización en el caso de pavimentos exteriores, el coste de la obra se elevará de manera importante, incluso duplicarse.
Ejemplos de presupuesto
- Cambiar un suelo de parquet en una habitación de 3x2 m, costará unos 300 €. Si el suelo es de tipo vinílico, el coste se reducirá hasta unos 180 €, mientras que si fuese un suelo de microcemento el precio se situaría en torno a unos 400 €.
- Poner un suelo nuevo en un cuarto de baño de unos 4 m², quitando el antiguo y poniendo un gres porcelánico de calidad media costaría alrededor de 250 €.
- Poner suelo de microcemento en una vivienda de unos 70 m² puede tener un precio aproximado de unos 4.200 €.
- Instalar un suelo nuevo de madera maciza adherido sobre pavimento previamente preparado en un salón de 30 m² supondrá una inversión aproximada de unos 2.500 €.
- Un suelo nuevo de resina epoxi de alta calidad y texturizada con efecto marmorizado en una vivienda (80 m² aproximadamente) podría llegar a costar 8.000 €.
Consejos para sustituir los pavimentos
Aprovechar para cambiarlos durante una reforma
Cualquier obra de reforma o de mejora es un buen momento para sustituir el suelo. Ese sería el caso, por ejemplo, de la renovación de las instalaciones de la vivienda, del cambio de revestimientos en cocina o baños o de la necesidad de mejorar el aislamiento en el caso de terrazas o sótanos. Hacer todos los trabajos a la vez será más cómodo y también se ahorrarán costes.
Prestar atención al espacio donde se va a instalar
Por sus características y su uso, no todos los espacios son iguales y son cuestiones que se deben tener en cuenta a la hora de poner un suelo nuevo. En el caso de cocina o baño se deben elegir siempre pavimentos que soporten bien la humedad y que se puedan limpiar con facilidad. Y, si se trata de lugares de tránsito elevado (espacios comerciales, hostelería, etc) o expuestos a las condiciones climatológicas se deben elegir suelos especialmente aptos para ese uso o de exteriores.
Valorar si es necesario quitar el suelo anterior
No siempre es necesario retirar el viejo pavimento para colocar uno nuevo. Es el caso, por ejemplo, de que se quiera instalar un suelo laminado o vinílico y, en algunos casos también pavimentos cerámicos. Se puede poner encima el nuevo sin ningún inconveniente, evitando así el gasto y las molestias que conlleva una obra.
Solo si hay que aislar o impermeabilizar el suelo o si este de parquet, tarima o laminado será imprescindible retirarlo para poder instalar el suelo nuevo.
No olvidar el aspecto estético
Aunque lo más importante a la hora de reformar los suelos sea el aspecto práctico y funcional de este, el aspecto estético tampoco debe ser obviado. Además, en la actualidad existe una gran variedad de materiales y modelos entre los que escoger, por lo que siempre se va a poder seleccionar una opción que aúne las ventajas del pragmatismo con el valor estético de los acabados finales.
Preguntas que hacer a los profesionales antes de cambiar los suelos
¿Se pueden cambiar los suelos sin tener que quitar los muebles?
Depende del suelo y depende de los muebles. Por ejemplo, cambiar el suelo de la cocina sin quitar muebles, es una opción que puede interesar si se quiere ahorrar un poco de dinero en el presupuesto. Sin embargo, en el caso de habitaciones como el salón y los dormitorios, el tipo de muebles no ayuda a que se cambie el suelo sin retirarlos previamente. En cualquier caso, los resultados suelen ser mucho mejores si los muebles se retiran, por lo que es lo más aconsejable en todos los casos.
¿Qué tipo de suelo va mejor para un local comercial?
Un local comercial es un espacio donde el tránsito de personas y mercancías es elevado, por lo que debe primar la resistencia del pavimento a la estética. En este sentido, algunas de las opciones más aconsejables pueden ser los suelos cerámicos, los suelos de microcemento o, incluso, el suelo de terrazo o aquellos desarrollados a partir de resina epoxi. Son suelos uniformes, duraderos y que aportan una estética muy atractiva para la clientela.
¿Qué es mejor cambiar antes, el suelo o las puertas?
Siempre hay que cambiar el suelo antes que las puertas. Es así porque la altura puede variar y, aunque sea muy ligeramente, puede provocar que las puertas rocen o, al contrario, que la hoja quede muy separada de la superficie. Lo ideal es poner el suelo nuevo y, una vez hecho, tomar medidas para las puertas.
¿Hay que quitar los sanitarios si se va a cambiar el suelo del baño?
No siempre es necesario. Por ejemplo, cuando se va a instalar un suelo vinílico, que tiene muy poco grosor y se corta con facilidad para que la baldosa se ajuste perfectamente a la base del sanitario.
En caso de que se vaya a instalar otro tipo de suelo y muy especialmente si se va a retirar el anterior sí que será aconsejable quitar los sanitarios. Por un lado, porque las bases de los sanitarios se atornillan al suelo y, por otro, porque en caso de querer cambiarlos más adelante, no habrá ningún problema en retirarlos.
Qué suelos poner si se quieren cambiar los de casa
Suelos para la cocina
El azuelo es sin duda una de las mejores opciones si se quieren cambiar los suelos de la cocina. Es resistente y duradero, soporta bien la humedad y, además, no se ve afectado por suciedad como la grasa o el aceite, muy presentes en la cocina. El precio de instalar un suelo de azulejo en una cocina dependerá del modelo que se seleccione. De media, la mayoría de ellos se mueven en un precio que va desde los 15 €/m² en los casos más baratos, hasta unos 40 €/m² en los casos más caros.
Suelos para el baño
Al igual que sucede con la cocina, en el caso de los baños, la mejor opción para los suelos del baño es el azulejo. En este caso, los precios también se sitúan en una horquilla que va desde los 15 € hasta los 40 €/m² aproximadamente.
Sin embargo, otra opción que no se puede pasar por alto para el suelo del baño es el microcemento, que ofrece gran resistencia y soporta perfectamente bien la humedad de esta estancia y, además, aporta un acabado elegante y sofisticado. Su precio medio se sitúa en torno a unos 40 €/m² en la mayoría de los casos.
Suelos para habitaciones
Existe una gran variedad de suelos que pueden ir bien para esta estancia. La madera es una buena opción siempre, tanto si se trata de parquet como de tarima flotante. Su precio oscila entre los 30 € y los 50 €/m² aproximadamente.
Sin embargo, otra opción que no se puede pasar por alto son los suelos laminados que aportan diferentes acabados (incluidos los que imitan a la madera), y son más resistentes y tienen precios más asequibles. De media, a unos 25 €/m².
Suelos para terrazas y balcones
A la hora de cambiar los suelos de terrazas y jardines es importante escoger opciones que soporten bien tanto la humedad como la radiación solar y los cambios de temperatura. En este sentido, los suelos porcelánicos son una buena elección, ya que se adaptan perfectamente a este tipo de necesidades. En este caso, es mejor escoger modelos de gama alta, ya que ofrecen mayor resistencia y durabilidad. Su precio medio se sitúa en torno a unos 30 € o 50 €/m².
Por otro lado, el uso de otras opciones como el microcemento o el cemento impreso también pueden ser una buena opción tanto en terrazas como en jardines. En este caso, el precio de estos suelos se sitúa entre los 40 € y los 60 €/m² según el caso. Todo ello, sin olvidar la posibilidad de instalar un suelo de terrazo si lo que se quiere dar es color al espacio.
Suelos para salones
Los suelos del salón permiten una gran variedad en su elección. Se puede optar por suelos clásicos de madera. Tanto en el caso del parquet como de la tarima flotante, los precios medios se situarán en torno a unos 30 € o 50 €/m². Sin duda, otra opción son los suelos laminados, mucho más baratos que la madera y, al mismo tiempo, muy resistentes. Su precio medio se sitúa en torno a unos 25 €/m².
Si se buscan opciones más modernas, también se pueden instalar suelos de microcemento o suelos porcelánicos en el salón. Incluso, suelos a partir de piedra natural, como por ejemplo el mármol. En estos casos, los precios variarían desde unos 40 €/m² en el caso del microcemento y los suelos porcelánicos para interior, hasta más de 75 €/m² en el caso de suelos a partir de piedra natural.