Reformar instalación fontanería: Precio y Presupuestos

Puntos importantes en la reforma de la fontanería

Tipo de reforma

Antes de hacer la reforma de la fontanería hay que plantearse qué es lo que se necesita, porque de ello dependerán también los trabajos. No es lo mismo cambiar solo las tuberías que, por ejemplo, cambiar la distribución de los elementos del baño. Mover de sitio un inodoro, por poner un ejemplo, requiere de un trabajo bastante complejo. 

Proyecto de instalación de fontanería

Cuando los trabajos vayan a ser de cierta envergadura, es decir, si se van a cambiar de sitio tomas de agua o desagües o hay que instalar puntos nuevos, lo mejor es contar con un proyecto. Supone una pequeña inversión, pero es la garantía de que la instalación no solo está bien planteada para ser eficiente, sino que se cumplen con todos los aspectos que marca la normativa en las instalaciones de fonantería. 

Fontanería por falso techo

Lo más cómodo y recomendable, y lo que los fontaneros profesionales hacen siempre que es posible, es llevar la fontanería por un falso techo, para bajar posteriormente por las paredes hasta las tomas. La razón es muy simple: en caso de avería es mucho más fácil localizarla y para su reparación no hay que realizar tanta obra como si va por suelo o paredes. Además, el agua caería en casa en lugar de filtrarse al piso inferior.

Materiales de las tuberías

Las tuberías, hoy en día, se fabrican en diferentes materiales. Las más habituales siguen siendo las de cobre, adecuadas porque soportan bien temperaturas elevadas. También se usa mucho el PVC, muy resistente a químicos, pero no tanto a temperaturas, por eso se usa más en desagües. Y hay un material más moderno que comienza a usarse mucho es el polietileno reticulado, un material flexible y resistente, perfecto para recodos. Elegir un material u otro dependerá de la instalación.

Consejos en las reformas de fontanería

• Reformar la fontanería y la instalación eléctrica

  Cuando se acometen obras de fontanería  o más recomendable es reformar todas las instalaciones. Habrá un sobrecoste, pero de esta manera se asegura que no haya que volver a levantar el alicatado cuando se quede anticuada la instalación eléctrica. Por ello, además de hacer una reforma integral de la fontanería conviene también cambiar la instalación eléctrica.

• Con obras mejor que sin obras

  Las obras siempre son más costosas, pero los resultados también son más eficientes y mucho más duraderos. Es así porque con una obra se renuevan por completo todos los elementos del circuito de fontanería y, a  la vez se pueden corregir defectos de la instalación.

  No obstante, si se quieren evitar reformas que haya que hacer más adelante, se puede optar por cambiar o renovar la fontanería sin obras revistiéndolas por dentro o haciendo una nueva instalación por fuera.

• Cambios de distribución en el baño y la cocina

  Si se quiere hacer un nuevo baño o cambiar de sitio la cocina habrá que tener en cuenta que las tomas de agua tendrán que llegar hasta los nuevos puntos. En estos casos las reformas de fontanería puede que se encarezcan un poco al tener que hacer obra nueva. Conviene tener en cuenta los requerimientos y aspectos técnicos para las instalaciones de fontanería: por ejemplo, no es recomendable situar los sanitarios del baño a más de 2 metros de distancia de la bajante para evitar atascos.

• Contar con profesionales

  Cualquier reforma debe ser realizada únicamente por especialistas del sector. Y es muy importante en el caso de la fontanería. ¿La razón? Que una instalación mal hecha no funcionará correctamente, y si es así puede acabar siendo necesario abrir techos o paredes para solventar el problema. Siempre es aconsejable fijarse en la experiencia y las referencias de los profesionales, además de en sus tarifas. 

Normativa general de las instalaciones de fontanería