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Precios de limpieza de suelo radiante
Tipo de limpieza | Precio (100 m²) |
---|---|
Limpieza completa de suelo radiante | 1.500 € |
Limpiar circuitos del suelo radiante | 400 € |
Limpiar colectores del suelo radiante | 300 € |
Limpiar tuberías del suelo radiante | 800 € |
Limpiar válvulas del suelo radiante | 200 € |
¿Cómo obtenemos los precios?
Tipos de mantenimientos y limpieza del suelo radiante
Mantenimiento correctivo
Es un tipo de mantenimiento que se realiza cuando en la instalación ha aparecido algún tipo de problema que provoca un funcionamiento deficiente de la misma. Lo más habitual es que se deba a una acumulación de lodos en el interior de las tuberías y que pueden colapsar los colectores si no se procede a una limpieza en profundidad.
Además de ello, puede ser necesario reparar averías, así como cambiar material o elementos que se hayan deteriorado. Este tipo de mantenimiento es más caro que el preventivo.
Mantenimiento preventivo
El mantenimiento preventivo del suelo radiante tiene el objetivo de garantizar que la instalación se encuentra en todo momento en las mejores condiciones posibles, haciendo una puesta a punto.
Básicamente, se trata de revisar los caudalímetros para comprobar que el agua se distribuye de manera equilibrada en los circuitos. En estos, por su parte, se comprueba si hay oxidación, que favorece la aparición de lodos. Finalmente, en caso de ser necesario, se procede a la limpieza de la calefacción por suelo radiante.
Información útil
El coste medio de un servicio de limpieza completa y mantenimiento de suelo radiante oscila entre 700 € y 1.500 €, entre 7 € y 15 €/m². Este precio depende de diferentes factores. Si se trata de limpiar solo una parte del sistema, como tuberías o colectores, será más económico. Por su parte, el estado que presente la instalación o si hay algún fallo o avería que se deba solucionar puede elevar el coste sensiblemente.
- 1 día
- Dificultad: Fácil
4 dudas sobre la limpieza y mantenimiento del suelo radiante
¿Con qué frecuencia se debe realizar?
Depende en buena medida del uso y de la antigüedad que tenga la instalación. Como medida general, conviene hacer una inspección al inicio de la temporada. Si se observa alguna anomalía, convendrá hacer una limpieza de lodos del suelo radiante. Es una operación que en instalaciones antiguas puede tener que realizarse cada dos años.
Sin embargo, las instalaciones más modernas se fabrican en materiales que son impermeables al oxígeno, de modo que esos lados tardan mucho más en generarse. En algunos casos, incluso, la limpieza de las tuberías del suelo radiante y su puesta a punto puede demorarse varios años.
¿Cuáles son los problemas más frecuentes del suelo radiante?
La falta de un mantenimiento adecuado del suelo radiante puede desembocar en algunos problemas serios. En primer lugar, la presencia de suciedad y lodos hará que la instalación tenga que trabajar mucho más, perdiendo así parte de la eficiencia energética. Cuando eso ocurre, se debe proceder a la limpieza de los colectores del suelo radiante, puesto que una obstrucción puede derivar en una avería.
Junto a ello, un deficiente mantenimiento puede derivar en problemas como una distribución irregular del calor o pérdidas de transmisión de este, puesto que los lodos hacen que el agua sea más densa. También pueden llegar a producirse fugas de agua en el circuito. Por ello, es fundamental proceder cada cierto tiempo a la limpieza del circuito de suelo radiante, así como de las bombas, las válvulas, tuberías y caldera.
¿Qué ventajas tiene la limpieza del suelo radiante en el funcionamiento de la instalación?
La limpieza de la calefacción por suelo radiante tiene dos ventajas fundamentales. La primera de ellas es el ahorro en el consumo. Un sistema que tiene un mantenimiento adecuado y que es sometido a limpiezas periódicas es un sistema que funciona de manera mucho más eficiente, reduciendo así el consumo de energía.
La segunda gran ventaja es que se evitarán averías que a la larga pueden resultar muy costosas. Por ello, invertir en el mantenimiento del sistema es invertir en una vida útil más prolongada.
¿Cómo se lleva a cabo la limpieza del suelo radiante?
Básicamente, consiste en inyectar aire o agua a presión que arrancan el lodo y fuerzan que el sistema se vacíe de agua y suciedad por las salidas de los colectores de los que dispone el suelo radiante. Previamente, se habrá introducido en el sistema un líquido desincrustante. Además de ello, será necesario limpiar manualmente las válvulas antes de llenar de nuevo de agua el circuito. En ese llenado se incorpora un aditivo para prevenir corrosiones.