Precios y Presupuestos para Tejas Solares

El funcionamiento de las tejas fotovoltaicas y térmicas es el mismo que el de los paneles solares: captan los rayos solares para generar corriente eléctrica o calefacción y agua caliente. Las tejas fotovoltaicas llevan incorporados unos pequeños módulos que captan la luz y la transforman en energía eléctrica. Mientras, las térmicas absorben el calor y calientan el aire que está bajo ellas para transferirlo a un acumulador.

Además de tejas fotovoltaicas y térmicas, hay una solución intermedia, las tejas híbridas, capaces de generar tanto electricidad como ACS y calefacción.

A pesar de que su funcionamiento sea similar, existen algunas diferencias entre las tejas solares y los paneles. El tamaño de las tejas es muy inferior, lo que posibilita que se puedan cubrir completamente todo tipo de tejados, incluso irregulares. Además de ello, estéticamente son más discretas que los paneles. 

Otra diferencia importante es que, mientras los paneles se pueden inclinar u orientar para absorber mejor la radiación, en el caso de los tejados solares eso no es posible. Y también hay que mencionar que la eficiencia de las tejas es algo inferior al de las placas, aunque es una tecnología en pleno desarrollo.

Los tejados solares tienen ventajas destacadas. Por un lado, cabe mencionar su perfecta integración en la construcción. Así, cumplen la doble función de dar cobertura y proteger la cubierta como un tejado convencional y de generar electricidad de forma apenas visible.

Por otro lado, si la superficie de la cubierta es amplia, se puede cubrir o incluso superar la demanda eléctrica del inmueble. Y una ventaja añadida es que en caso de que una teja se averíe o rompa, no interfiere en el funcionamiento de la instalación y se puede sustituir sin problemas. 

En lo que respecta a los inconvenientes, el mayor es el precio, puesto que la inversión inicial es más elevada que en el caso de paneles solares. Además, su mantenimiento es más complicado y las tejas no son orientables.

Las tejas solares se pueden instalar en casi todo tipo de tejados, tanto de viviendas como de inmuebles destinados a usos no residenciales o construcciones aisladas a las que no llegue el suministro eléctrico. 

Son más eficientes en tejados inclinados, puesto que la captación solar es mayor cuando existe un cierto ángulo en la disposición de las tejas. Y, por otro lado, lo ideal es instalar tejados solares en obra nueva, puesto que es más sencillo adaptar la instalación y los costes serán algo inferiores.