En esta guía
- Precios de revisar instalación eléctrica
- ¿Con qué frecuencia hay que revisar la instalación eléctrica? Precios
- Información útil
- ¿Cuánto cuesta revisar la instalación eléctrica?
- Consejos para comprobar el funcionamiento de la instalación eléctrica
- Preguntas frecuentes sobre la revisión de la instalación eléctrica
- Por qué es importante solicitar la revisión de la instalación eléctrica
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Precios de revisar instalación eléctrica
Tipo de trabajo | Precio |
Revisión instalación eléctrica 50 m² | 250 € |
Revisión instalación eléctrica 70 m² | 300 € |
Revisión instalación eléctrica 100 m² | 350 € |
Revisión instalación eléctrica 120 m² | 400 € |
Revisión instalación eléctrica 150 m² | 500 € |
¿Cómo obtenemos los precios?
¿Con qué frecuencia hay que revisar la instalación eléctrica? Precios
Revisar la instalación eléctrica de locales
El Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión establece un listado de instalaciones sometidas a inspecciones periódicas obligatorias cada cinco años: instalaciones industriales que precisen proyecto y con potencia instalada superior a 100 kW; locales de pública concurrencia; locales con riesgo de incendio o explosión, de clase I, excepto garajes de menos de 25 plazas; y locales mojados con potencia instalada superior a 25 kW, entre otros. Las revisiones debe realizarlas siempre una empresa instaladora autorizada inscrita en el Servicio Territorial de Industria y Energía.
El coste de la revisión dependerá del tipo de local y características de la instalación. En el caso de un pequeño comercio dedicada a la venta o una ofincina, el coste podría situarse alrededor de 200 €.
Revisar instalación eléctrica en viviendas
La normativa no obliga a que las viviendas pasen revisiones, aunque sea aconsejable hacerlas cada cierto tiempo o cuando se vaya a hacer reforma. El REBT sí obliga, en cambio, a que se realicen inspecciones cada diez años en aquellas instalaciones comunes de edificios de viviendas con potencia total instalada superior a 100 kW. Las comunidades autónomas, por otra parte, también puede requerir otro tipo de revisiones, como en Madrid, donde se exige que las comunidades con más de 25 viviendas pasen una inspección obligatoria si la fecha de su legalización es anterior al 18 de septiembre de 2003 y repetir la inspección cada diez años.
El precio de una revisión está relacionado con la superficie del inmueble. En el caso de una vivienda de 100 m² costaría alrededor de 350 €.
Información útil
Revisar la instalación eléctrica tiene un coste medio de unos 200 €- 250 €. El precio va a depender de factores como las dimensiones de la instalación, su uso o los elementos de los que disponga.
En el caso de inmuebles de pequeñas dimensiones, el coste se sitúa alrededor de los 80 €. Si la vivienda es grande, podría elevarse hasta los 400 €, con certificado de reconocimiento de instalación eléctrica incluido.
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¿Cuánto cuesta revisar la instalación eléctrica?
Factores que influyen en el precio
El coste de una revisión eléctrica no es fijo. No está regulado, de modo que cada profesional o empresa pueden establecer sus propias tarifas. Estas pueden variar, de modo que el consejo es solicitar siempre varios presupuestos y comparar. En el presupuesto, por otra parte, incluirán diferentes factores:
- Tipo de inmueble: influye, en primer lugar, por las dimensiones que tenga. Revisar instalación eléctrica de un edificio eleva su previo notablemente respecto a la de viviendas. Y, dentro de estas, el trabajo en un unifamiliar será más caro que en un apartamento. Más superficie suele implicar instalaciones no solo más grandes, con más elementos y a veces más complejas, lo que eleva el coste de la revisión.
- Complejidad de la instalación eléctrica: por potencia, por número de elementos que la integran o por requerimientos específicos de seguridad, hay instalaciones que requieren de muchas más horas de trabajo a la hora de acometer una revisión. Ese sería el caso, por ejemplo, de inmuebles con un gran número de aparatos conectados o de gran potencia, como pueden ser naves industriales, o de locales dedicados a restauración.
- Servicios adicionales: es habitual que además de revisar la instalación eléctrica se acometa otro tipo de trabajos. Pueden ser reparaciones de elementos deteriorados, cambio por otros homologados (si se trata de instalaciones muy antiguas) o ampliación de algún punto o toma de luz. Si hay que hacer alguna pequeña reparación o cambiar algún enchufe, el presupuesto puede elevarse a unos 350 €, cantidad similar a la que cuesta sustituir un cuadro no homologado por otro que sí lo esté. Cada nuevo punto de luz cuesta, de media unos 50 €.
Ejemplos de presupuesto
Por tanto, el abanico de precios de revisar una instalación eléctrica es muy amplio. Teniendo en cuenta los factores mencionados, los siguientes serían presupuestos aproximados:
- Revisar la instalación de un piso de 60 m² poniendo toma de tierra cuesta alrededor de 300 €. Si hay que cambiar algunos enchufes el coste se elevará a unos 400 €.
- Una inspección para revisar la instalación de una vivienda de 100 m² y localizar pérdidas de corriente tiene un precio de unos 500 €.
- Revisar la instalación de un piso antiguo de 90 m², cambiando una parte de la instalación que ha quedado obsoleta cuesta alrededor de 1.600 €.
- Revisar instalación eléctrica de un local destinado a oficina con cinco puestos de trabajo, instalando tres nuevos enchufes y un interruptor nuevos cuesta, aproximadamente, 250 €.
Consejos para comprobar el funcionamiento de la instalación eléctrica
Revisar el cuadro eléctrico
El cuadro eléctrico es el corazón de la instalación eléctrica, por ello, hay que asegurarse de que está en perfecto estado. En él tiene especial importancia el interruptor diferencial, que es el que sirve de protección frente a cortocircuitos, descargas o incendios. Este lleva un botón de prueba, marcado con una T, que permite comprobar si funciona correctamente. Al pulsarlo, se debe interrumpir la corriente. Si no es así, conviene revisarlo o sustituirlo.
Es importante tener en cuenta que el diferencial no es lo mismo que el interruptor general, ya que este salta cuando se supera la potencia máxima que soporta la instalación. Si lo hace a menudo, conviene revisar la potencia contratada o evitar conectar a la vez varios aparatos. El diferencial, por su parte, salta cuando hay una fuga de corriente o un problema en la instalación.
Posibles fugas o cortocircuitos
Son dos de los grandes peligros que implica una instalación en mal estado. Las fugas son pérdidas de energía que pueden deberse a diferentes factores, aunque lo más habitual es que los cables estén deteriorados y hayan perdido el aislante que los protege. Para comprobarlo, se deben desconectar los aparatos. Si el contador registra consumos es porque hay alguna fuga.
Respecto a los cortocircuitos, la forma de comprobar dónde se ha producido es ver qué interruptor ha saltado dentro del cuadro general. Si al desconectar el aparato y subir el interruptor este vuelve a saltar, el problema está en el circuito, de modo que será necesario revisarlo. Si no salta, es problema del aparato. Los cortocircuitos también pueden producirse porque la instalación entre en algún punto en contacto con agua o por el mal estado de los enchufes.
Comprobar el estado de los enchufes
A la hora de revisar la instalación eléctrica de una vivienda, local o edificio, hay que asegurarse de que enchufes e interruptores están en buen estado y perfectamente anclados a la pared. En el caso de los enchufes, para comprobar si tiene corriente, se emplea un polímero. Es importante fijarse especialmente en aquellos que tienen un uso más intensivo y también en esos otros que chispean al conectar a ellos algún aparato. Si muestran síntomas de deterioro, lo mejor será cambiarlos.
No solo los enchufes, conviene también revisar que los interruptores funcionan sin problemas, sobre todo en circuitos conmutados y aquellos situados en estancias húmedas (cocina y baño).
Preguntas frecuentes sobre la revisión de la instalación eléctrica
¿Qué comprobaciones se realiza durante la revisión de la instalación?
En líneas generales, en la revisión de la instalación eléctrica de una vivienda se comprueba que los materiales y dispositivos de la instalación son adecuados, así como la verificación de las protecciones para evitar daños personales o materiales. En este sentido, se inspeccionan aspectos como puestas a tierra, diferenciales, interruptores magnetotérmicos, circuitos o conexiones. Además de ello, se realiza una evaluación de equipos e instalaciones para comprobar si se adecuan a normativa y se realizan clasificaciones de áreas de peligrosidad, entre otros aspectos.
Cuando se trata de instalaciones comunes de edificios, se inspeccionan las instalaciones de enlace, así como las correspondientes a los servicios generales del edificio (alimentación de ascensores, centrales de calor y frío, alumbrado, grupos de presión, etc.). También son objeto de revisión instalaciones receptoras comunes asociadas a los edificios, como garajes, piscina o alumbrado exterior que se alimenten desde la misma caja general de protección.
¿Quién está autorizado para realizar la revisión de la instalación eléctrica?
Las revisiones de la instalación debe realizarlas siempre un electricista o técnico cualificado. En el caso de las inspecciones obligatorias que marca el Reglamento Electrotécnico para Baja Tensión o en aquellas que marquen las comunidades autónomas, el trabajo queda en manos de profesionales o empresas inscritos en el Servicio Territorial de Industria y realizarse a través de un Organismo de Control Autorizado (OCA).
¿En qué consiste el acta de revisión periódica de instalaciones eléctricas?
Es el documento que se emite después de la revisión de la instalación eléctrica cuando esta es obligatoria por normativa (locales de pública concurrencia o con riesgo de incendios, instalaciones comunes de edificios con potencia superior a 100 kW, etc.).
El certificado de revisión de instalación eléctrica da fe del estado en el que se encuentra la instalación. Si es favorable, se remite copia al organismo competente. Puede ser favorable con defectos leves, en cuyo caso habrá que subsanarlos antes de la siguiente inspección. Si es condicionado significa que hay defectos leves anteriores no solucionados o defectos graves y se dará un plazo de seis meses para su resolución.
Si el acta es negativa se debe a la detección de defectos muy graves que ponen en riesgo la seguridad de personas y bienes. Por ello, se emite un certificado al órgano competente de la comunidad autónoma para que tome medidas al respecto.
Por qué es importante solicitar la revisión de la instalación eléctrica
Cumplimiento de la normativa vigente
La normativa que regula todo lo relacionado con instalaciones eléctricas se ha modificado en los últimos años. El objetivo final es garantizar la seguridad de las instalaciones ante usos para los que hace unas décadas no estaban preparadas. Sobre todo en el caso de inmuebles antiguos, la revisión de la instalación permite determinar si sus elementos se adaptan a las nuevas exigencias y sustituirlos por otros hoy homologados, si no lo están.
En el caso de locales, es importante cuando hay un cambio de uso. Los requisitos exigidos pueden variar mucho de unas actividades a otras, de modo que es imprescindible comprobar si la instalación y sus elementos se adaptan conforme a la ley.
Evitar accidentes y averías eléctricas
Una instalación eléctrica en mal estado es peligrosa, ya que eleva el riesgo de descargas, cortocircuitos o accidentes. Comprobar el estado de sus principales elementos es fundamental para evitarlo. Además, también se reduce la posibilidad de averías no solo en la propia instalación, sino también en aparatos y equipos conectados a ellas. Una sobrecarga, por ejemplo, puede derivar en daños irreparables o en roturas muy costosas, sin olvidar que en espacios de trabajo puede suponer tener que paralizar la actividad por ello.
Ahorro energético
Cuando la instalación está obsoleta o en mal estado no es eficiente. Las fugas y pérdidas de energía son más habituales en instalaciones envejecidas y elevan el consumo energético. También lo elevan en el sentido de que si son muy antiguas ni su diseño ni sus materiales estarán preparados para soportar los nuevos usos, de modo que el gaste de energía por el sobreesfuerzo también se dejará notar en la factura. Además, las nuevas instalaciones están dotadas de tecnología que optimizan el consumo, lo que garantiza un mayor ahorro.